Los sensores de ocupación son dispositivos utilizados para la automatización del encendido y apagado de las luces en un área especifica de un edificio. Su uso correcto va a depender de una auditoria del área o las áreas a donde van a ser instalados. Los sensores de ocupación son una excelente opción de automatización sencilla de las luces de un edificio. Existen tres tipos de sensores, el pasivo infrarrojo, el ultrasónico y el de tecnología dual.
El sensor pasivo infrarrojo es un sensor que utiliza el movimiento y el calor humano para discriminar si un área está ocupada o no. Se recomienda su uso en áreas de alto movimiento y donde el sensor tenga amplio espectro visual, es decir que no se obstaculice su visión. Utiliza un destello de luz infrarroja, imperceptible al ojo humano, que usa para sensar movimiento y detectar temperatura corporal. No se recomienda su uso en áreas de poco movimiento como oficinas abiertas y cerradas, ya que al pasar un tiempo prudente el cuerpo humano tiende a asumir la temperatura del ambiente y al perder este elemento de discriminación, el sensor puede apagar las luces con personas dentro de la zona cubierta. Esto hace que el ocupante se incomode, ya que tiene que ondear las manos o hacer algún tipo de movimiento rápido para volver a encender las luces.
El sensor ultrasónico es un sensor de ocupación que utiliza un sonido ultrasónico como su nombre indica, para discriminar si una zona está ocupada o no. Este sonido, el cual no puede ser escuchado por el ser humano, llena el volumen del área en cuestión y utiliza el efecto doppler para discernir. Es decir, cuando en la zona donde se encuentra este sensor se produce un movimiento, la frecuencia del sonido emitido varia. Esta información se devuelve al sensor y le indica que está ocupada. Su uso se recomienda en zonas abiertas, donde existen cubículos, oficinas cerradas, donde existe mínimo movimiento y en baños. Los sensores ultrasónicos son mucho más eficientes que los pasivos infrarrojos y permiten disminuir al mínimo los apagados indeseados de las luces.
El último tipo de sensor es el de tecnología dual. Este sensor utiliza las dos tecnologías existentes para discriminar si una zona está ocupada o no. Es decir, utiliza los medios de un sensor ultrasónico y un sensor pasivo infrarrojo, para detectar con precisión si un área se encuentra ocupada o no. Este sensor se tiene que poner de acuerdo con estos dos criterios para dar un veredicto, lo que hace que sea el más eficiente de los tres. Su uso puede ser en todo tipo de áreas. Pero debido a su costo, se limita su uso para áreas criticas donde se desea la mayor precisión en el encendido y apagado de las luces de una zona.
Esta es solo una introducción a esta solución de eficiencia energética en edificios. En subsecuentes publicaciones estaremos dando más detalles sobre este interesante medio de control de las luces de nuestro edificio.
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